Por Washington Cabello
(NEW YORK, Estados Unidos).- La pandilla compuesta por 12 elementos que está acusada de asesinar en esta ciudad, al estudiante dominicano Lesandro Guzmán Feliz (Junior), se declararon “inocentes”, en la Corte Criminal del condado El Bronx, donde ocurrió el crimen.
Todos enfrentan cargos de homicidio sin premeditación, asalto a pandillas y posesión criminal de un arma. Seis enfrentan cargos de asesinato en segundo grado, con sentencias de 50 o más años, y los otros de asesinato en primer grado, con una condena a cadena perpetua.
El joven, de 15 años de edad, fue brutalmente asesinado el 20 de junio, frente a una bodega. La policía los ha identificado como miembros de la pandilla Los Trinitarios.
Mientras los guardias escoltaban a dos de los sospechosos fuera de la sala del tribunal, la madre de Guzmán Feliz, les gritaba en español, “¡asesinos!”.
El duodécimo y probable último sospechoso, Luis Cabrera Santos, de 25 años, llegó a Nueva York, un día antes después que fue extraditado desde Connecticut, donde la policía estatal lo arrestó la semana pasada en una carretera interestatal, al chequear la placa del carro que conducía, con un lector de placas. Los otros fueron arrestados en Nueva York y Nueva Jersey.
Cabrera Santos, está acusado de conducir uno de los automóviles en el que varios de los pandilleros escaparon de la escena del crimen, pero a través de un traductor, negó la responsabilidad en el asesinato y dijo que ni siquiera conoce a los otros acusados.
La policía asegura que el grupo aparece en los vídeos de vigilancia y de celulares, acuchillando y matando al adolescente.
Los investigadores dicen que el grupo de pandilleros, todos supuestamente miembros de la violenta pandilla de Los Trinitarios, asesinaron al estudiante de 15 años de edad a machetazos y puñaladas, después de arrastrarlo fuera de la bodega “Chiky y Cruz”, donde se escondió y fue sacado de ahí por el grupo.